Ha llegado el momento de quitarse el casco

Casi todo en la vida se reduce a la elección del momento oportuno, especialmente en mi mundo. Para mí, ha llegado el momento de quitarme el casco y descansar.

La Carrera de Campeones será mi despedida. A los 8 años ya conducía karts por una pista de la costa oeste de Escocia, por lo que considero un gran honor poder representar a mi país en una carrera que me permitirá competir con algunos de los más grandes pilotos del mundo.

Ha sido un viaje increíble con muchos momentos de gloria y también de sufrimiento. Me considero una persona privilegiada, pues he conseguido convertir mi gran pasión en mi profesión.

He tenido la suerte de ser educada por unos padres brillantes que nunca me hicieron sentir que los deportes de motor eran solo para niños y que estaba desviándome del camino preestablecido por mi género. Siempre me hicieron creer que podía conseguir lo que quisiera si me esforzaba lo suficiente y no desistía.

Con 13 años, mi sueño y objetivo principal pasó a ser la Fórmula 1. Qué cerca estuve de conseguirlo. Deseé y luché arduamente para conseguir estar en la parrilla de salida pero, teniendo en cuenta este comienzo de año y la situación actual de la F1, me temo que no va a ser posible.

Mi instinto me dice que ha llegado el momento de pasar página. Es el momento de explorar, encontrar nuevos desafíos y obligarme a conocer nuevos entornos. Para todos los deportistas es difícil saber dónde poner el límite, pero en mi caso considero que este viaje a llegado a su fin.

En retrospectiva, hay algunos momentos clave que siempre destacarán. La final del Campeonato Mundial de Karting, mi primer podio en la Fórmula Renault y ser finalista al premio BRDC al Piloto joven del año; pero por lo que más me siento agradecida es por mi gran debut con Mercedez Benz en el Campeonato Alemán de Turismos.

Era mi gran oportunidad. La aproveché y acepté el desafío. No solo fueron unos excelentes 7 años, también me brindó la oportunidad de conocer a un hombre que creía en mis
sueños, que siempre me ha animado a dar lo mejor de mí y que sigue inspirándome todos los días. Un hombre con el que tengo la suerte de haberme casado.

Mi progreso en el mundo de la Fórmula 1 representa mucho más que a un piloto de carreras que simplemente intenta alcanzar la cumbre de su deporte. También representaba una posibilidad, la esperanza de volver a ver a una mujer en la parrilla de salida. Aproveché la situación, me contagié de la energía de mis seguidores y trabajé duro. Estaban quienes deseaban que tuviese éxito. También quienes no.

Solo puedo decir que lo dí todo. ¿Considero que la F1 está preparada para acoger a una buena piloto de carreras que pueda competir a los más altos niveles? Sí. ¿Creo que es posible para una mujer? Por supuesto. ¿Lo veremos en poco tiempo? Lamentablemente, no. Hay dos baches cruciales, uno es que no hay muchas niñas que se inicien en el pilotaje de karts desde pequeñas y otro es que no tendrían ningún modelo a seguir. A veces, se necesita ver para creer.

Quiero llamar la atención sobre estos dos baches. Me gustaría ayudar a la siguiente generación con un pequeño legado. Con la ayuda de la MSA (Asociación británica de Deportes de Motor), vamos a lanzar una nueva iniciativa cuyo objetivo principal es celebrar los triunfos conseguidos por mujeres en los diferentes deportes de motor, tanto en competiciones como fuera, pero que al mismo tiempo nos permita transmitir a las siguientes generaciones la idea de que los deportes de motor son una opción. Me atreví a ser diferente y quiero servir de inspiración a otros para que hagan lo mismo.

Finalmente, decir que estoy entusiasmada por lo que me trae el futuro y, aunque estoy cerrando esta puerta, ya estoy impaciente por abrir la siguiente. ¡Siempre para adelante!

Prensa  Susie Wolff

Compartir la nota
  •  
  •  
  •  
  •  
  •  
  •  
  •  
  •